QUERIDA SOFÍA:
No te conozco pero me ha dado por pensar en que así te llamas.
No me conoces pero quiero decirte que tú vas a ser la madre de mis hijos. Apenas tengo 17 años, y tú has de tener unos 15, o sea que no hay prisa...
Te escribo porque tengo tres cosas importantes que decirte ya desde ahora.
Tenme confianza. En verdad te digo que me estoy preparando no sólo para apantallarte y deslumbrarte cuando crucemos la mirada por primera vez (sino buscando qué peinado me queda mejor, si me dejo crecer el bigote y unas patillas delgaditas...). También no estoy esforzando por no dejarme llevar tan fácil por el mal genio que a veces me cargo. Eso de ser "macho" es tan fácil... Te prometo que me estoy esforzando para aprender a reaccionar con respeto y dándote tu lugar.
Te propongo que desde ahora llevemos una vida sana. Estoy metido en un equipo de fut, en donde no soy ningún gran goleador. Soy un buen delantero sin más, pero me gusta hacer ejercicio y convivir con los cuates. Veo que el deporte me quita los malos pensamientos. ¿A quién no le da curiosidad saber qué se siente al probar los "dulces" o darle un toque a un carrujito? Pero pienso en nuestros hijos, y mejor no le entro . Ya te contaré cómo le está yendo a un amigo, vecino de toda la vida, que está bien atrapado en las adicciones. Híjole... vieras qué gacho.
Traigo una idea metida que no acabo de encontrar la manera de decirla. Tiene que ver con la religión. Eso de ir a la iglesia, últimamente no es lo mío. Sí voy cuando hay una boda en la familia, o para Navidad y Semana Santa, pero nada más. Ahora traigo esa preocupación: ¿Cómo les voy a enseñar a nuestros hijos que Dios es un Padre, si yo no acabo de lleverme bien con él?¿Si a veces le tengo miedo?¿Si casi no le platico? Por eso te propongo que tanto tú como yo tratemos de llevarnos bien con Dios, que aprendamos a hablarle y a tratar de oírlo.
Creo que para ser buenos papás se necesita más que esto, pero por lo pronto yo te propongo que le echemos ganas a esto. ¿Cómo la ves?
Jonathan Armando, el futuro padre de tus hijos.
Fuente: Agenda Joven 2009. Editorial Buena Prensa, A.C.
No te conozco pero me ha dado por pensar en que así te llamas.
No me conoces pero quiero decirte que tú vas a ser la madre de mis hijos. Apenas tengo 17 años, y tú has de tener unos 15, o sea que no hay prisa...
Te escribo porque tengo tres cosas importantes que decirte ya desde ahora.
Tenme confianza. En verdad te digo que me estoy preparando no sólo para apantallarte y deslumbrarte cuando crucemos la mirada por primera vez (sino buscando qué peinado me queda mejor, si me dejo crecer el bigote y unas patillas delgaditas...). También no estoy esforzando por no dejarme llevar tan fácil por el mal genio que a veces me cargo. Eso de ser "macho" es tan fácil... Te prometo que me estoy esforzando para aprender a reaccionar con respeto y dándote tu lugar.
Te propongo que desde ahora llevemos una vida sana. Estoy metido en un equipo de fut, en donde no soy ningún gran goleador. Soy un buen delantero sin más, pero me gusta hacer ejercicio y convivir con los cuates. Veo que el deporte me quita los malos pensamientos. ¿A quién no le da curiosidad saber qué se siente al probar los "dulces" o darle un toque a un carrujito? Pero pienso en nuestros hijos, y mejor no le entro . Ya te contaré cómo le está yendo a un amigo, vecino de toda la vida, que está bien atrapado en las adicciones. Híjole... vieras qué gacho.
Traigo una idea metida que no acabo de encontrar la manera de decirla. Tiene que ver con la religión. Eso de ir a la iglesia, últimamente no es lo mío. Sí voy cuando hay una boda en la familia, o para Navidad y Semana Santa, pero nada más. Ahora traigo esa preocupación: ¿Cómo les voy a enseñar a nuestros hijos que Dios es un Padre, si yo no acabo de lleverme bien con él?¿Si a veces le tengo miedo?¿Si casi no le platico? Por eso te propongo que tanto tú como yo tratemos de llevarnos bien con Dios, que aprendamos a hablarle y a tratar de oírlo.
Creo que para ser buenos papás se necesita más que esto, pero por lo pronto yo te propongo que le echemos ganas a esto. ¿Cómo la ves?
Jonathan Armando, el futuro padre de tus hijos.
Fuente: Agenda Joven 2009. Editorial Buena Prensa, A.C.
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